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Descubre aquí la recopilación de los mejores experimentos científicos innovadores para niños y convierte tu casa en un divertido laboratorio
Soy partidaria del ocio, pero del ocio sano. De ese tipo de ocio como: pasar la tarde en el sofá leyendo, o, mientras llueve reunir a la familia y jugar juegos de mesa. ¡Ese sí!
Pero,
Ese ocio de no hacer nada y estar en cama en un estado ‘modo avión’ que es algo así como: no estoy despierto, pero tampoco estoy dormido; ¡Ese no!
La vida se pasa muy rápido como para verla desde la comodidad de la cama, además que es saludable, rico e importante estar activo, tanto mental como físicamente.
Ahora,
¡Si tienes hijos es el triple de importante!
Ya que esos pequeñitos con la energía de 5 adultos, están en el mejor momento para aprender, conocer, descubrir y crear; además que todo ese brío, esa pila cargada para hacer de todo, hay que sacarla; y si se puede canalizar para que además de quemar energía estén divirtiéndose y aprendiendo, mucho mejor.
Muchos de nosotros, contamos en casa con los recursos para tener a los chiquitos entretenidos; libros, rompecabezas, juegos didácticos, juegos de mesa, colores, crayolas, marcadores, hojas, cartones, pegante, bloques para construir… Sin embargo llega un momento donde esto, no es suficiente, el interés va bajando y llega el aburrimiento.
Y es hora,
Aquí es hora, de nosotros como papás, meter la mano e involucrarnos. Es el momento para ofrecerles a nuestros pequeños alternativas; innovadoras actividades que puedan romper con el tedio del día a día, y así ellos puedan explorar nuevas formas para divertirse y aprender.
Las opciones pueden ser variadas, y te invitamos a que te des una pasada por esta entrada de blog, donde encontrarás actividades, juegos, pasatiempos y ejercicios para hacer con tus niños; porque el día de hoy hablaremos de solo un recurso en particular:
¡Experimentos!
Vamos a hablar de experimentos científicos innovadores para niños, todos son para hacer en casa, con materiales cotidianos, reciclables, y fáciles.
Ahora,
¿Cuál es la fascinación por los experimentos?
¡Es mucha! y te cuento el por qué:
Los experimentos son una de las formas de despertar creatividad en los niños, de incentivarlos a preguntarse, a cuestionar y a buscar nuevas vías para la resolución de problemas. Además,
Son una herramienta eficaz para que ellos vayan descubriendo y entendiendo los fenómenos de la naturaleza, que suelen ser complejos si no se explican de una forma ‘amigable’, como por ejemplo el fenómeno de la refracción y reflexión, el efecto doppler, la fuerza eléctrica y los campos magnéticos; y otros más sencillos como el arcoíris y los colores.
¿No es maravilloso?
Es muy maravilloso que nuestros pequeños ávidos de información, encuentren en los experimentos respuestas; a la vez que cambian de actividad, se distraen y sobre todo se divierten.
Ahora sí, entremos en materia:
Experimentos científicos innovadores para niños
Creando mi propio arcoíris
Foto por: Árbol ABC
Aprovechemos que seguimos en Abril, mes en el cual celebramos el día mundial del arcoíris (el 3), y demos paso a este experimento fácil y sin materiales complejos.
Materiales:
+ Tijeras
+ Espejo
+ Vaso con agua
+ Linterna
A la práctica ---->>
En un cuarto muy oscuro, pon un vaso de agua sobre una mesa y metes el espejo en el vaso, formando cualquier ángulo. Aléjate y con la linterna dirige la luz hacia el espejo y ¡boom! Mira como aparece un hermoso y colorido arcoíris.
¿Qué nos dice la ciencia?
Nuestro arcoíris es un fenómeno óptico resultado de la refracción de los rayos del sol por la lluvia.
En este caso su formación fue resultado de la incidencia de la luz de la linterna en la superficie de una gota de agua; cuando el rayo entra al agua, la luz cambia de velocidad y se dobla,
Entonces, cuando la luz entra al agua se refracta y cuando sale de la gota también!
Y aquí es, la luz se refleja en varios ángulos creando el arcoíris.
Si no podemos ir al mar ¡Hacemos nuestro mar en una botella!
Foto por: Pequeocio
¡Qué delicia playa, brisa y mar! Pasar el día entre la arena es el sueño de muchos, sin embargo para cuidarnos en casita, no podemos hacer esa travesía.
Si como muchos de nosotros tus peques aman y extrañan el mar, para que se les haga más fácil la falta de él, creen su propio mar en una botella. ¿Cómo? ¿Con qué? Mira aquí:
Materiales:
+ 1 botella plástica de 1L importantísimo: que sea transparente
+ Embudo (lo puede crear cortando una botella)
+ Agua
+ Colorante vegetal azul (puede ser del que tengas, te recomiendo vegetal porque es comestible y no tóxico)
+ Aceite de cocina
A la práctica ---->>
Con el embudo agrega agua en la botella plástica hasta llegar a 1/3 de la botella, ¡color! Pon 3 o 4 gotitas del colorante azul y mezcla bien, muy bien (si lo quieres más azul, le agregas más gotitas); coloca el embudo otra vez y termina de llenar la botella con los 2/3 que faltan con el aceite de cocina; cierra la botella con fuerza para que no se riegue, para la ¡magia! Mueve la botella por los extremos y mira como el mar se materializa ante todos ¡El oleaje es divino!
¿Qué nos dice la ciencia?
El agua y el aceite son líquidos que no se pueden mezclar porque tienen diferentes densidades.
Al estar juntos en un mismo recipiente, hay posibilidades de que creen un emulsión (que es un nuevo líquido con una nueva densidad que se forma cuando se mezcla dos líquidos de diferentes densidades)
Pero,
Si no se revuelve con fuerza, es posible que estos líquidos vivan juntos sin mezclarse; por esto cuando movemos la botella suavemente se ve el agua azul formando el oleaje del mar, y el aceite por encima ayudando a que esto pase.
¿Nieve? ¡Sí!
Foto por: Guía infantil
Y de un experimento que nos llevó a la costa, al calor del mar… ¡Nos vamos para el frío!
Con materiales muy comunes vamos a crear nieve mágica, que es idónea para que los peques hagan experimenten diferentes texturas en su mano y puedan jugar y crear.
Materiales:
+ 4 pañales de bebé
+ 6 vasos pequeños
+ 1 recipiente mediano
+ Colorante vegetal azul, amarillo y rojo
+ Tijeras
+ Agua
A la práctica ---->>
Con las tijeras abres los pañales por la mitad y le sacas el algodón, con la palma de las manos lo frotas para que se convierta en polvo, lo reservas en el recipiente mediano.
En 3 de los vasos pequeños pones agua, agregas 4 gotitas de colorante y revuelve bien, cada vaso con un color diferente; en los otros 3 vasos, pones el polvo que sacaste del pañal y con cuidado vierte el agua en los vasos que tienen el polvo.
¡Ya está lista la nieve! La puedes poner sobre un papel para que los peques jueguen.
Si ves que todavía tiene mucha agua, le pones más polvo, sin embargo el polvo está pensado para absorber cantidades grandes de agua.
¿Qué nos dice la ciencia?
Los pañales comunes llevan un componente no tóxico que es el que los hace absorber los líquidos, el poliacrilato de sodio. Ese componente aumenta su volumen cuando absorbe cantidades grandes de agua. Por esto al mezclarlo con nuestra agua colorida se expande y de la textura ‘nieve’.
¡Globos, globos y más globos!
¡Los globos son sinónimo de fiesta, diversión y comida! En este experimento vamos a unir estas tres variables, y el resultado será genial.
Materiales:
+ Un vaso de agua tibia
+ Recipiente con agua tibia
+ 2 cucharadas de levadura seca ¡Ojo! No es polvo de hornear, es levadura de panadería
+ 2 cucharadas de azúcar
+ 1 botella de vidrio de cuello delgado
+ Embudo (lo puede crear cortando una botella)
+ Globos de colores
A la práctica ---->>
En un vaso con agua tibia, disuelve las 2 cucharadas de levadura y mezcla bien, agrega la azúcar y vuelve a revolver; con la ayuda del embudo pasa esta mezcla a la botella de cuello delgado, y pon el globo en la boca de la botella; mete la botella (en la posición normal, vertical) dentro del recipiente lleno de agua tibia; al cabo de unos minutos, la mezcla empezará a generar burbujas, ¡y el globo inflará!
¿Qué nos dice la ciencia?
La levadura seca se alimenta del azúcar, y libera dióxido de carbono (las burbujas) el gas liberado aumenta la presión dentro de la botella,
¡Y el globo se inflará con este gas!
¿Ves? La mezcla perfecta: fiesta, diversión y comida!
¡Flores de colores!
La naturaleza definitivamente es un tema que apasiona a los niños y niñas por igual; los animales, las flores, las plantas y la lluvia; entre otros, llaman la atención de los más pequeños, llevándolos a hacerse preguntas sobre cómo pasa esto y aquello.
Con este experimento tu peque, podrá gozar de algo tan simple como es el cambio de color de una flor; pero quedará impactado con el resultado.
Materiales:
+ Flores blancas (claveles o gérberas)
+ 4 Frascos de vidrio medianos
+ Colorante alimenticio de 4 diferentes colores
+ Agua
A la práctica ---->>
Llena el frasco de vidrio a la capacidad de 2/3, agrega 4 o 5 gotitas de colorante (un color diferente en cada frasco) Mete las flores en los diferentes frascos, ahora ¡paciencia! Porque puede tardar horas, incluso días dependiendo de los factores ambientales para que la flor tome todo el color.
Pero…
El resultado (aunque tarde días) no defraudará, tendrás unas magníficas flores de colores hechas en casa.
¿Qué nos dice la ciencia?
El agua viaja a través del xilema (tejido vegetal que conduce la savia y sostienen la plantita) por el tallo y llega a las hojas para hidratar los pétalos.
¿Cuál de todos los experimentos científicos innovadores para niños te gustó más?
¿Cuál crees que tus hijos disfrutarán?
Experimenta y cuéntanos.
Laura Buelvas Martínez.
Comunicadora de INVENTÓPOLIS.
Comunicadora en Lenguajes Audiovisuales de la UDEM.
Lectora empedernida, tejedora, cocinera y mamá de Rafaella.
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